31 de enero de 2010

Un día en casa de Tato....

Hola a tod@s, hoy quiero contar como es un día laboral en mi casa. Me quieren convencer que son los mejores días de la semana porque así puedo dormir tranquilo y sin nada ni nadie que me moleste, porque ni se enciende la tele ni se pone la música a tope.

Cuento un poquito como es un día en mi casa, lo primero es levantarme, nunca he dicho que soy muy perezoso y me cuesta mucho mover de mi cama, la verdad es que me tienen que llamar muchas veces excepto cuando noto el olor a las tostadas calientes, entonces si que me planto rápido en la cocina.


Acto seguido toca primera salida, hay que vaciar....


Después de la vuelta rápida es un sin vivir, esto es lo que más odio del día.


Yo no sé que es eso, dicen que es para quitar los pelos que dejamos por todo, no sé.... desde luego a mí me los pone de punta. No es eso todo, muchas veces lo dejan olvidado y me cierran el paso, así que a esperar a que alguien venga a quitarlo.....


Ron siempre va de valiente pero este artefacto tampoco le gusta mucho. Os cuento un secretillo?? cuando viene alguien extraño a casa y no quieren que molestemos colocan esto en la puerta de una habitación y mientras dura la visita allí que estamos Ron y yo mirando el aparato y sin atrevernos ni a mover ni un ojo!! a mí no me gustan las puertas cerradas.


Esto es un ataque contra nosotros y la rabia que me da es que encima se divierten....


Como ya he contado muchas veces tengo mi rincóncito, donde me siento seguro, allí me meto y me quedo más tranquilo, veo todo, pero....de lejos mejor.


Dios mio......ahora toca el otro aparato "el lavavajillas" al cual no logro acostumbrarme a su sonido.
Así se pone mi cara y mis orejas cuando se pone en marcha.....


Va llegando la hora de quedarnos solos y empiezo a ponerme cardiaco, ahora toca sacar más aparatos....
Esto va colocado en la puerta de mi casa, estoy 5 horas alejado de la puerta de entrada y si no....decirme quien es capaz de acercarse a esa tía y a los palos con el miedo que les tengo.....(mesita con las esquinas totalmente restauradas varias veces y la puerta mejor que no se vea, y eso que Tato carece de dientes superiores, gracias a la brillante idea de un cazador que se los quito para que no dañara las piezas cazadas).



Así me paso casi 5 horas esperando que alguien se asome por la puerta y vuelva a casa, miro todo el rato la puerta de lejos .... y os aseguro que soy incapaz de pegar un ojo mientras estoy solo.....
(Fotos hechas a escondidas y sin saber que realmente no estaba solo, en 5 horas es incapaz de quedarse dormido).



Aquí casi me vence el sueño, pero no puedo dormirme, si lo hago.....puede pasarme algo malo, estoy solo!!


Transcurre el tiempo y por fin alguien vuelve a casa, eso significa que es la hora de la comida!!! Como podéis ver la chica me persigue, dicen por aquí que diga por qué.... Bueno....pues que detrás de la estantería está el saco de pienso, siempre me hago el tardón comiendo para que me dejen solito y cuando termino suelo meter el morro en el saco, dando lugar a que investigaran de porque el saco duraba tan poquito, un día alguien hizo guardia sin que yo me diera cuenta y me pillaron comiendo a destajo pienso, mi mamí decía...¿pero porque se engorda tanto Tato si le pongo poquito pienso?? Esto se acabo gracias a la chica de la foto, ya no me atrevo ni acercarme a ella.


Y así suelen ser los días en mi casa, entiendo que no pueden estar conmigo todo el día y que hay cosas que aunque no nos gusten es mejor hacerlas, sé que todas estas cosas las hacen con todo el amor del mundo, como también sé que luchan diariamente por que algún día logre superar todas las cosas que ha día de hoy todavía me asustan, así como también les doy ha entender que algún día "lo lograré".

Lametones de Tato.

1 comentario :

  1. Jajajja, qué bueno el post. Cómo vives Tato, pareces un marajá. El la foto que estás en la cama estás para comerte vivo, y ni te cuento de la carita escuchando el lavavajillas. Qué cosa más preciosa. Dile a mami que no te atormente con la aspiradora, jeje. Y dile también, que no eres un galgo gordo, pobre Tato, pillado comiéndose el saco de pienso... el de mi casa está en un armario bajo llave, sino revientan comiedo. Besos a todos.

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